«Con el láser holmium conseguimos una destrucción inmediata del cálculo urinario»

El urólogo de Policlínica Gipuzkoa, Dr. Alejandro González, analiza las formas en las que la litiasis urinaria se presenta y ofrece consejos para su prevención y tratamiento.

Alejandro González, urólogo de Policlínica Gipuzkoa, nos habla sobre la litiasis urinaria, también llamada cálculo urinario o, simplemente, piedras. Y es que se trata de unos agregados que se forman en la vía urinaria debido a un exceso de determinados minerales o sustancias que tenemos en la orina. Pueden estar localizados a cualquier nivel de la vía urinaria, si bien lo más frecuente es en el riñón y el uréter, aunque también las podemos encontrar en la vejiga o uretra.

¿Por qué se produce la litiasis urinaria?

Se debe a ciertos compuestos que el paciente expulsa en la orina en una cantidad excesiva. Hay muchas causas para su formación, ya que influyen los factores dietéticos, el clima, las infecciones, la agregación familiar y algunas enfermedades genéticas pueden estar tras ella. Habrá que detectar la causa para hacer un tratamiento preventivo y evitar que al paciente se le formen nuevas piedras, porque una vez se ha tenido una litiasis urinaria, existe un 25% de posibilidades de desarrollar una nueva en los siguientes años.

¿Hasta qué punto es frecuente y a quién afecta?

La prevalencia está en aumento y varía del 1 al 20% en diferentes países, aunque en los desarrollados está en torno al 10% de la población. En consulta recibimos a pacientes de ambos sexos con este problema.

¿Presenta siempre sintomatología?

Hay un amplio abanico de síntomas que el paciente puede notar, pero hay quien no los tiene. En este caso, el hallazgo del cálculo es casual: aparece en una prueba de imagen que se haya pedido por otro motivo y llegamos así al diagnóstico.

Cuando la piedra se mueve y provoca una obstrucción a la salida urinaria, vamos a tener el llamado cólico renal, un cuadro de dolor de intensidad variable que puede llegar a ser muy intenso, similar o superior al del parto, muy difícil de controlar, que viene desde la zona del riñón y se irradia hacia delante. Es típico que vaya por rachas, de mayor o menor intensidad, y a veces se acompaña de molestias o sangrados en la micción.

«Una vez se ha tenido una litiasis urinaria, existe un 25% de posibilidades de desarrollar una nueva»

Dr. Alejandro González

Cuando se presentan los síntomas, ¿Qué debemos hacer?

Cuando tenemos el dolor, es importante intentar mantener una adecuada hidratación porque puede indicar que la piedra se está moviendo y está queriendo salir hacia el exterior. Debemos ingerir mucho líquido, tomar analgésicos y vigilar síntomas de alarma, como la aparición de fiebre, nauseas y vómitos, o un dolor muy fuerte. En estos casos, deberemos acudir a Urgencias porque el cólico se puede estar complicando y requerir una atención urgente. Entonces se le hará una evaluación para ver si hay alguno de los datos de complicación.

En caso de que no llegue a ser tan fuerte, porque sea un cólico pasajero que el paciente pueda controlar en su domicilio, igualmente deberá pedir cita con el urólogo para completar la evaluación y determinar qué tipo de piedra tiene y cómo es su caso. Es importante completar el estudio de una manera adecuada, con un análisis de sangre y de orina y una prueba de imagen, porque nos dará idea de cómo está el paciente, si el cálculo está causando algún daño al riñón, si existe infección urinaria y el tipo de piedra que tiene en cuanto a tamaño y localización.

«El cólico renal es un cuadro de dolor que puede llegar a ser muy intenso, similar o superior al del parto»

Dr. Alejandro González

¿Cuándo y cómo se determina la necesidad de intervención?

Se da en aquellos casos en los que el dolor sea muy difícil de controlar y el riñón se esté estropeando o dejando de filtrar adecuadamente, o veamos un tamaño y una localización de la piedra que nos haga pensar que será difícil que el paciente expulse por sí mismo. En todos esos casos, nos plantearemos la cirugía.

Nosotros apostamos por la ureteroscopia con láser holmium, una cirugía muy poco invasiva porque utiliza el propio trayecto de la vía urinaria con un sistema de luz e irrigación, unas cámaras muy finitas, con las que llegamos hasta la litiasis. Con ese láser, la fragmentamos y pulverizamos e incluso podemos recuperar algún fragmento para mandarlo a analizar. Así, conseguimos una solución inmediata del problema destruyendo totalmente el cálculo.

¿Cómo es el postoperatorio?

Una vez terminada la cirugía, que suele durar en torno a una hora, el paciente está una o dos horas en reanimación y vuelve a la planta de hospitalización, donde tiene atención 24 horas. A las 12 o 18 horas el dolor estará totalmente controlado y la orina estará ya clara, por lo que podremos retirar sonda y vías y permitirle irse a casa. La incorporación a la vida ordinaria y laboral suele ser muy rápida, en pocos días.

«Con el láser, fragmentamos, pulverizamos e incluso podemos recuperar algún fragmento del cálculo para analizar»

Dr. Alejandro González

El láser siempre presenta muchas ventajas, pero exige también una gran técnica…

En Policlínica Gipuzkoa tenemos una gran experiencia con este tipo de cirugías, ya que hacemos varias cirugías cada semana. Tras la cirugía, haremos una serie de revisiones al paciente y realizaremos un asesoramiento personalizado, porque vamos a detectar así la aparición de nuevos cálculos y vamos a darle asesoramiento dietético y si es necesario con fármacos para evitar la aparición de nuevas piedras.

«La incorporación a la vida ordinaria y laboral suele ser muy rápida, en pocos días»

Dr. Alejandro González

¿Es el láser holmium una solución definitiva?

Lo es en tanto que elimina la piedra actual pero, como hemos comentado, hay pacientes que pueden volver a desarrollar. Dependiendo del resultado de la cirugía, de si hemos mandado el cálculo a analizar y de otra serie de analíticas del paciente, vamos a valorar si necesita algún apoyo farmacológico o algunos consejos en la dieta para evitar que vuelva a formar una nueva litiasis. El paciente acudirá a consultas periódicas para detectar cualquier tipo de problema.

¿Existe alguna forma de evitar que aparezca la litiasis?

Las recomendaciones generales para evitar la generación de litiasis consistirían en una abundante ingesta de líquidos, una dieta baja en sal, moderada en consumo de proteínas y, dependiendo del tipo de litiasis, se le añadiría algún consejo más específico, como determinados alimentos a evitar o determinadas situaciones, como el estrés o el verano, cuando se ingieren menos líquidos.