Diagnóstico Genético Preimpantacional

Dentro de los límites legales que la ley 14/2006 sobre técnicas de reproducción humana asisitida, se enmarca el DGP, que se puede practicar en centros autorizados para:

  • Detectar enfermedades hereditarias graves, de aparición precoz y no susceptibles de tratamiento curativo postnatal, con objeto de seleccionar preembriones no afectos para la transferencia.
  • Para la detección de otras alteraciones que puedan comprometer la viabilidad del embrión.

Circunstancias que favorecen un DGP

Evitar la interrupción voluntaria temprana del embarazo eliminando la angustia de la pareja tras la realización de un diagnóstico prenatal, sobre todo en parejas con un alto riesgo de padecer desórdenes genéticos.

Las técnicas de diagnóstico prenatal requieren que el feto esté formado, pero en los últimos años se ha potenciado el diagnóstico preimplantatorio, es decir, un diagnóstico en el embrión antes de que se implante en el útero materno.

Para la realización de esta técnica es necesaria la formación de embriones en el laboratorio, con lo que precisa la realización de una técnica de reproducción asistida (FIV o ICSI). El análisis se realiza en una célula obtenida de este embrión, mientras éste se sigue manteniendo en el laboratorio y, una vez analizado y comprobada su normalidad se procede a la transferencia al útero materno.

Para ello, se realiza un orificio en la membrana pelúcida de un embrión gracias a un láser en día +3 (en estadío de 6-8 células) o bien en día +5 (en estadío de blastocisto), y a través de él se extrae una blastómera o un grupo de células (blastocisto), que serán analizadas mediante la técnica correspondiente para determinar su normalidad o anormalidad. Una vez realizado el estudio se podrá decidir los embriones adecuados para la transferencia.

Tipos de estudio

Estudio de aneuploidías

Se utiliza en casos de:

  • Abortos de repetición.
  • Fracasos repetidos de anidación en Reproducción Asistida.
  • Edad materna avanzada.

Consiste en el estudio de todos los cromosomas. Se realiza gracias a la técnica de CGH array (Comparative Genomic Hybridization), que permite estudiar la ganancia o pérdida de cromosomas completos o regiones subcromosomales (una porción del cromosoma).

Una vez realizado el estudio, se seleccionan para transferir aquellos embriones “normales“ respecto al número de cromosomas.

Este mismo estudio se puede realizar con otra tecnología diferente (Secuenciación Masiva), más conocida por sus siglas en inglés NGS (Next Generation Sequencing).

Reordenamientos cromosómicos

La presencia de translocaciones cromosómicas equilibradas dentro de uno de los miembros de una pareja, se traduce en un riesgo elevado en la descendencia de presentar alteraciones cromosómicas de forma desequilibrada, dando lugar a abortos, o a nacidos con graves deficiencias o malformaciones.

Hoy en día, el DGP nos permite una selección embrionaria para descartar embriones desequilibrados para los cromosomas implicados.

Se realiza gracias a la técnica de CGH array (Comparative Genomic Hybridization), que permite estudiar la ganancia o pérdida de regiones subcromosomales (una porción del cromosoma).

Hecho el tratamiento y estudiados los embriones resultantes podremos realizar transferencias de embriones normales o equilibrados para el reordenamiento estudiado, no pudiendo distinguir los portadores equilibrados de los no portadores de dicha translocación.

Hoy en día, en el mismo momento gracias al CGH array, se estudia además la pérdida o ganancia de cromosomas completos, por lo que se estudian en el mismo proceso todos los cromosomas.

Selección de sexo

Existen enfermedades genéticas graves recesivas ligadas al cromosoma X que hacen que las mujeres transmitan la enfermedad y que los varones la padezcan.

La estrategia a seguir en estos casos es la realización de un DGP para distinguir los embriones varones (XY) de los embriones hembras (XX) y transferir solamente embriones XX. Así podremos transferir embriones que estarán libres de la enfermedad aunque sí podrán transmitirla.

Las enfermedades más conocidas ligadas al cromosoma X son las siguientes:

  • Hemofilia.
  • Distrofia muscular de Duchenne.
  • Síndrome de Lesch-Nyham.
  • Síndrome de Hunter.

Se realiza gracias a la técnica de CGH array (Comparative Genomic Hybridization), que permite estudiar la ganancia o pérdida de cromosomas completos.

Hoy en día, en el mismo momento gracias al CGH array, se estudia además la pérdida o ganancia de cromosomas completos, por lo que en el mismo proceso se estudian todos los cromosomas a la vez y no sólo los cromosomas sexuales.

Este mismo estudio se puede realizar con otra tecnología diferente (Secuenciación Masiva), más conocida por sus siglas en inglés NGS (Next Generation Sequencing).

Enfermedades genéticas monogénicas

En la actualidad, existe un número amplio de enfermedades genéticas graves causadas por mutaciones conocidas que hoy en día son susceptibles de realizar un Diagnóstico Genético Preimplantacional, realizando un estudio en el embrión antes de ser transferido, asegurándonos así que dicha enfermedad desaparecería en la descendencia de la familia afectada.

Básicamente, el fundamento es el mismo que en el resto de los DGPs, estudio de informatividad a la pareja, estudio de los embriones y transferencia de embriones sanos. La diferencia está en la forma de trabajar, el estudio de la mutación se realiza por estudios moleculares.

El campo de aplicación es tan amplio, que podemos decir que en teoría se podría aplicar casi a cualquier enfermedad hereditaria con mutación conocida. Las indicaciones más utilizadas hasta ahora son las siguientes:

  • Fibrosis Quística.
  • Síndrome de X frágil.
  • Distrofia miotónica de Steiner.
  • Esclerosis tuberosa.
  • Poliquistosis renales.
  • Thalasemias.

Este catálogo, se va ampliando progresivamente, a medida que se van conociendo nuevas mutaciones, abarcando en este momento a cientos de enfermedades.

Resultados

La tasa de éxito global del programa de DGP está en un 45% de posibilidades de embarazo por transferencia, aunque estos porcentajes varían en función de la indicación del caso y edad de la paciente.