Medicina Deportiva

Si vas a participar en alguna prueba deportiva ¡Hazlo bien!

 

En Francia y en la mayoría de países del norte de Europa es obligatorio presentar el certificado de haber pasado un chequeo deportivo para parti­cipar en competiciones de alto nivel. Los chequeos deportivos están dirigidos a todos los que practican deporte, especial­mente a los no profesionales porque son los que concentran mayor índice de riesgo.

Según explica el especialista en medicina deportiva, Enrique Pérez de Ayala, “hay que tomar medidas para realizar una prueba física ya que un esfuerzo de esa magnitud tiene que estar controlado”.

Un chequeo deportivo no sólo diagnos­tica si existe una patología sino que puede ayudar al deportista a mejorar su rendimiento. El Dr. Pérez de Ayala ase­gura que con un chequeo deportivo no sólo el deportista ganará en salud sino que puede mejorar su rendimiento en­tre un 20 y 30 %. Con las pruebas diag­nósticas que realizamos conocemos el nivel de fatiga del deportista y le po­demos asesorar para realizar un buen tiempo de carrera de manera segura.

En la consulta solemos ver patologías derivadas de una mala o incorrecta pisada

El podólogo que dirige la Unidad del Pie de Policlínica Gipuzkoa, Javier Alfaro, explica que es muy importante una correcta pisada a la hora de realizar deporte, ya que exis­ten tratamientos para prevenir y tratar posibles patologías.

“En la consulta solemos ver patologías derivadas de una mala o incorrecta pi­sada, numerosas lesiones musculares de las piernas pueden tener su origen en la forma de pisar y la importancia de una buena pauta de estiramientos o la correcta elección de la zapatilla pueden ser claves para evitar lesiones” explica el podólogo. Una de las patolo­gías más comunes en los corredores es el Síndrome de la cintilla iliotibial, más conocida como “Rodilla del corredor”.

Se manifiesta con un dolor en la rodilla al poco de empezar a correr, 10 – 15 mi­nutos, “y el tratamiento para esta pa­tología puede ser tan simple como el uso de unas plantillas, ya que con ellas conseguiremos una correcta pisada y por lo tanto una disminución del do­lor” concluye Javier Alfaro.