No te vayas a la cama con el móvil cerca

El uso de dispositivos, como el móvil, ordenadores, tablets… a última hora del día puede tener como consecuencia un síndrome de retraso de fase de sueño. La intensidad de luz de las pantallas afecta a la liberación de melatonina y retrasa los ritmos circadianos si su uso es diario», asegura Ana Arena, neurofisióloga de la Unidad del Sueño de Policlínica Gipuzkoa.

«La mayor consecuencia es que al retrasarse la fase de sueño son incapaces de levantarse a una hora temprana, duermen pocas horas y esto dificulta un buen rendimiento diurno siendo la somnolencia más pronunciada en la primera mitad del día», afirma Ana Arena.

En palabras de la especialista, «el ocio online facilita que las ‘malas costumbres’ de horarios de sueño se generalicen entre los jóvenes ya que es a última hora del día cuando juegan online, utilizan redes sociales, móvil… y lo hacen hasta la madrugada». «Un uso crónico de dispositivos a última hora del día puede tener como consecuencia un síndrome de retraso de fase de sueño. Este síndrome se relaciona con un uso excesivo de la TV/ordenadores/tablets en horarios tardíos. La intensidad de luz de las pantallas afecta a la liberación de melatonina y retrasa los ritmos circadianos si su uso es diario», afirma Ana Arena.

Consecuencias de un mal descanso

«La mayor consecuencia es que al retrasarse la fase de sueño son incapaces de levantarse a una hora temprana, duermen pocas horas y esto dificulta un buen rendimiento diurno siendo la somnolencia más pronunciada en la primera mitad del día –asegura la neurofisióloga- la consecuencia más grave, ya que estos horarios se hacen incompatibles con los estudios o trabajos en horarios convencionales».